martes, 9 de septiembre de 2008

EL Erecteión.

El Erecteión data como el resto de la acrópolis de Atenas del siglo V a. C, es una representación jónica de la casa de Erecteo según Homero. Erecteo es un antiguo heroe, fundador de Atenas, a veces también se le identifica con Poseidón. El Erecteión se encuentra orientado hacia el noroeste, acropolis abajo, hacia el camino sagrado de Elesias. El Erecteion está situado en el extremo norte de la Acrópolis. La construcción de este complejo y singular monumento fue confiada a Mnesikles, autor también de los Propileos. o bien a Calícatres. La primera fase de los trabajos se inició en el año 421 a.C. y llega hasta el 414. Interrumpidos los trabajos por las Guerras Médicas, no se reanudarían hasta el 409 a.C., siendo finalmente concluido el edificio en el 406. De órden Jónico. Fue levantado en marmol Pentélico.
Al construirlo representaron los signos de la batalla que libraron Poseidón y Atenea por el Atica, Zeus prometió el Atica a aquel Dios que lograra el mayor bien. Así supuestamente encontramos las huellas de los tres picos sobre la roca, donde clavó el tridente Poseidón e hizo brotar un manatial de agua salada, a lo que Atenea respondió plantando un olivo junto a ella. Esta ganó ante el tribunal de los dioses quedando el cuidado del Atica, ayudada de Cécrope (posiblemente el primer rey de Atenas) que dio testimonio de que ella llegó primero. El olivo se encuentra en el recinto exterior dedicado a Pandroso, hija de Cécrope. Este olivo ha tenido mucha importancia. A continuación habalaremos un poco sobre la historia del olivo: historia, leyenda y dioses.
Los antiguos egipcios creían que la diosa Isis, esposa del dios supremo Osiris, les había entregado el árbol, su cultivo y la forma de utilizar sus frutos, tanto para obtener el preciado aceite, como la condimentación y elaboración de las aceitunas de mesa, las cuales consumían en grandes coantidades. Isis era conocida con el sobrenombre de Atena, que en la antigua lengua egipcia significaoriginada por sí misma, aludiendo su autosuficiencia, aún en su propia concepción.
Desde Egipto se difundió su cultivo al Mediterráneo oriental, transmitiendo junto a la técnica, el propio mito de su origen, pues en Grecia el olivo estaba consagrado a la diosa Atenea, que Zeus la engendró por sí solo, a partir de su cabeza. La diosa se disputó con Poseidón la soberanía, como hemos dicho anteriormente, de la ciudad fundada por Cercope. Los dioses dictaminaron conceder la ciudad a quien produjera la mejor obra para sus habitantes. Poseidón dio un golpe de tridente y apareció un bello caballo blanco. Atenea golpeó el suelo con su lanza e hizo brotar un olivo cargado de frutos. La diosa obtuvo la victoria. Los ciudadanos, agradecidos impusieron el nombre de Atenas a su ciudad, en su honor.
Parece ser que los olivos que hoy se ven en la Acrópolis son descendientes de ese mítico primer ejemplar, que estuvo situado detrás del erecteión, y que cuidaron como a un tesoro. Cuando notaban que el olivo sagrado había crecido, se les llenaba el corazón de esperanza. La veneración al olivo fue tal, que los triunfadores de los juegos olímpicos eran coronados con ramas de olivo, sin embargo este simbolismo no fue entendido por un general romano, que al presenciar la coronación de los vencedores, exclamó: Jamás conquistaremos a este pueblo que se esfuerza tanto por tan reducida recompensa.Reemplaza al templo arcaico de Atenea Polias que se encontraba entre el Partenón y el emplazamiento actual y que fue destruido por los persas en el 480 a.C. durante las guerras médicas.
De planta irregular, por el declive del terreno, consta de tres pórticos. Uno de ellos, la cara sur, es la famosa tribuna de las Cariátides, que indicaba la tumba del mítico rey Cécrope. Consta de seis columnas con figura de mujer de 2,3 metros de altura, que sostienen el entablamento. Las que se encuentran in situ son copias; 5 de ellas se encuentran en el Museo de la Acrópolis, y una en el Museo Británico de Londres. Contaba con decoración policromada.
Está situado en el emplazamiento de la Acrópolis primitiva y agrupaba algunas de las reliquias más antiguas y más sagradas de los atenienses; es en este lugar donde tuvo lugar la disputa entre Atenea y Poseidón, donde se puede ver la marca de su tridente sobre una roca.
Se halla allí también el Paladio, una estatua de Atenea, consagrada por Cécrope, el rey mítico del Ática, y donde se cree que ella había caído del cielo; las tumbas de Cécrope y de Erecteo; une capilla dedicada a Pándroso, la hija de Cécrope; un pozo de agua salada y el olivo sagrado, que Atenea dio a la población tras su disputa con Poseidón.
La necesidad de preservar los sitios sagrados, explica probablemente la complejidad de la concepción. El templo no está dedicado a una divinidad en particular, sino que está constituido de varios santuarios. Tres de estos santuarios están dedicados a Atenea, Poseidón y Zeus. Se supone que los otros dos santuarios están dedicados a Cécrope y Erecteo, dos famosos reyes atenienses. El Erecteión se compone de un cuerpo principal, de los pórticos norte y sur y de varios anexos. El cuerpo principal consiste en cuatro partes que no representan más que la mitad de un proyecto inicial que no fue jamás acabado. La necesidad de preservar los sitios sagrados, explica probablemente la complejidad de la concepción. El templo no está dedicado a una divinidad en particular, sino que está constituido de varios santuarios. Tres de estos santuarios están dedicados a Atenea, Poseidón y Zeus. Se supone que los otros dos santuarios están dedicados a Cécrope y Erecteo, dos famosos reyes atenienses.
Fachada suroeste.
Fachada sureste.







El Erecteión, eregido en la Acropolis en frente del Partenón, y quizás obra de Mnesiklés, es un templo jónico excepcional. El hecho de que el terreno fuera accidentado, y el temor a destruir los santuarios anteriores del lugar, forzaron al arquitecto a idear una complicada planta asimétrica. El entablamento del pórtico que oculta la bajada a la tumba de Erecteo se apoya sobre unas esculturas femeninas llamadas cariátides.
El Erecteión, que en griego se escribe Erekhtheion, es un templo construido entre el 421 y el 406 antes de Cristo, en la Acropolis de Atenas para dar cobijo a los culto más antiguos de la ciudad. Las numerosas vicisitudes que ha sufrido (utilización como iglesia, como harén y como lugar de resistencia; amputaciones realizadas por lord Elgin) hacen difícil el reconocimiento de su disposición interior.
Es la obra maestra del estilo jónico, el Erecteión presenta cuatro fachadas muy distintas: el Este, un pórtico da acceso a la capilla de Atenea (en la que se conserva el xoanon de la diosa), al Norte, un vestíbulo con columnata que conduce al prostomieo; al Sur, el célebre pórtico de las cariátides precede a la escalera de la tumba de Cécrops; la fachada Oeste está formada por ventanas separadas por columnas embebidas. El friso se componía de figuras de marmol blanco sobre un fondo de caliza azul de Eleusis (múseo de la Acrópolis). En el recinto exterior, dedicado a Pándroso, se alzaba el olivo sagrado de Atenea.
Fachada norte.
fachada norte.
Detalles de las columnas, arquitrabe y friso de la fachada este.





Quizá se comenzó hacia el 421 a.C., y tras un largo periodo de abandono, se reanudó, hacia el 409 a.C., terminándose tres años más tarde. Poco después de su terminación parece que sufrió un incendio, pero fue reparado rápidamente. Experimentó nuevos incendios y nuevas restauraciones en época romana, y sifrió muchasalteraciones y daños en la Edad Media, pero ha sido reconstruido con cuidado y habilidad.
En cuanto a la perfección de su acabado, este templo nunca ha sido superado. Estuvo profusamente decorado con adornos labrados y con el estudiado contraste de caliza negra de Eleusis y mármol blanco, de lo que ya hemos visto un ejemplo en los Propileos. La complejidad de sus collarinos y capiteles no tiene casi paralelos, y sufrió el rechazo del gusto imperante en los siglos posteriores. Las columnas parecen haber sido copiadas en el Monumento de las Nereidas, en Licia, aproximadamente un cuarto de siglo después de su errección, pero el siguiente ejemplo seguro de su influencia en un proyecto estrictamente arquitectónico se encuentra en el templo circular de Roma y Augusto, erigido a unos noventa metros del mismo Erecteión. Estas copias quizá hubieran sido condenadas por las críticas modernas, como ejemplos de la extravagancia romana, si hubieran perecido sus bellos modelos; es cierto que mucho se ha perdido en la imitación.
La planta del Erecteión sería incomprensible si no supieramos que fue proyectado para reunir en un solo edificio unos cuantos santuarios antiguos. El arquitecto tuvo que enfrentarse con un suelo extremadamente irregular y las tradiciones religiosas locales le impidieron tomar medidas tan drásticas como las que se adoptaron en el emplazamento del Partenón. El suelo descendía hacia el norte y el oeste. El probable que algún tipo de nivelación y cercado de los distintos santuarios se realizara en los años que siguieron a las Guerras Médicas, pero no es seguro que ningún edificio precediera el Erecteión.
Para el exterior del nuevo templo, el arquitecto adoptó dos niveles distintos que diferían en más de tres metros. El este y el sur estaban en el nivel más elevado, no muy por debajo del del Partenón. Este nivel venía en parte impuesto por las estructuras inferiores existentes del antiguo templo de Polias. El cuerpo del templo era exteriormente una simple estructura rectangular, orientada en dirección este-oeste, a la que se accedía desde el este a través de un pórtico próstilo tan ancho como todo el edificio. Este pórtico constaba de seis colúmnas jónicas, en una solo fila, de cerca de siete metros de alto, con antas que eran apenas pilastras adosadas; estaba coronado por arquitrabe, friso y frontón.
El Erecteión es un edificio poco satisfactorio. El arquitecto, consteñido por exigencias religiosas, como Mnesicles, renunción a conseguir un conjunto armonioso. Concentró su interés en los detalles y en una compleja decoración, con una espléndida profusión, desconocida desde el siglo VI. Su obra es el reflejo en la arquitectura de la ruptura general de la tradición de austera moderación a la que la personalidad de Pericles había dado una prolongación espéndida, pero artificial. Habría queañadir que algunos arquólogos mantienen que el mismo Mnesicles fue el primer arquitecto del Erecteión, pero eso es dificil de creer.
Vista de la fachada sureste.
Trabajos de mantenimiento en el Templo.
El Partenón visto dede el Erecteión.





No hay comentarios:

Publicar un comentario